El 22 de Noviembre de 2012, con la invitación de Marga Roura (@MargaRoura) y Nati Viñuelas, me fui a pasar un buen rato a la escuela Cardenal Cisneros, de la Universidad de Alcalá de Henares. Hicimos dos sesiones de descubrimiento de formas no convencionales de poesía para los alumnos de Literatura Española y su Didáctica (3º de Grado de Educación Primaria) y para los de Comunicación y Medios Socioculturales de 1º de Grado de Educación Infantil. Me lo pasé pipa, en las charlas y además porque fue una oportunidad de intercambiar experiencias con Marga, tanto vitales como de descubrimiento de un montón de referencias interesantes para mi Blog y, también, para mi Víctor, como los libros de Hervé Tullet o el arte, bastante poético en esencia, de Banksy o los juegos para pensar de molleindustria.org. En fin, Gracias Marga y Nati por este día tan chachi.
Charla en UAH/Cardenal Cisneros (Foto de M. Roura)
Para esta ocasión seguí usando esencialmente los mismos poemas que cuando voy a un instituto, pero tuve la oportunidad de ahondar en dos cosas. Pudimos explicar más en detalle algunos poemas que quizás requerían de un público más maduro, como alguno de los interactivos y los generados por ordenador. Por otro lado pude profundizar en el discurso paralelo. Se enfatizó mucho más en la necesidad de que el destinatario se apropie del poema interpretándolo –o en el caso de las opciones más interactivas, incluso concluyendo su creación-, de tal modo que dos espectadores distintos NO DEBEN construir el mismo significado en el caso de que estén recibiendo un mensaje artístico y, por ende, NO TIENEN PORQUÉ sentir del mismo modo o estar de acuerdo en la apreciación o su gusto sobre un poema. Utilicé la metáfora de la señal de tráfico. Mientras que una señal o un panel de autovía están construidos para que todo lector interprete lo mismo, una obra de arte lo está para servir como disparador de emociones, para que cada intérprete, dependiendo de su horizonte experiencial, recree significados propios. El auditorio fue fantástico: no disimulaba si no les gustaba algo o se les apagaba la atención no evitaban que se les notara, pero cuando encontraban algo que les enganchaba, participaban muy activamente. Estoy muy contento porque incluso recibí comentarios que nunca hubiera pensado sobre algunos de los poemas y que me han aportado mucha más riqueza a la hora de reinterpretarlos. Y, como guinda, les di la opción de participar en la segunda edición del libro de micropoemas de Telira, compartiendo su creación y opinando sobre la de los demás en eseeusee.com y hubo quien me recogió el guante… ¿He dicho ya que estoy encantado?
Charla en UAH/Cardenal Cisneros (Foto de M. Roura)
Como siempre, al principio de la sesión se ofreció a los participantes un formulario en que mediante un código sinóptico se podía valorar cada poema a medida que se iban comentando. Se pretendía recuperar cuánto atraía/gustaba cada poema, cómo de sencillo les resultaba leerlo (uno de los puntos clave de la narrativa del ciberespacio es su usabilidad o facilidad de consumo de los contenidos) y un brindis al sol: si creían que podrían animarse a producir poemas en un formato similar al presentado. La regla de oro del cuestionario era que era anónimo y que no era obligatorio, aún más, podía elegirse responder un fragmento y no otro si, por ejemplo, se decidía dar la opinión de uno de los poemas, pero no de otro que hubiera resultado menos saliente… En las dos sesiones se presentaron prácticamente los mismos poemas, con la excepción de Dancing Rhino, Sumergida y Desprendiendo y WordToys que se utilizaron como comodín dependiendo de cómo iba desarrollándose la sesión y se recogieron 59 respuestas de las que se han integrado en los resultados 58 (¡Hubo una que daba su opinión de poemas que venían en la encuesta, pero que finalmente no vimos!)
¿Cuáles fueron los resultados? Los gustos se repartieron sobre tipologías distintas de poemas y aunque entre los más apreciados están ‘los habituales’, llama la atención su apreciación de formas más… podríamos decir… abstractas de poesía, como Bacterias Argentinas. Es evidente que aunque a los que somos un poco más mayores nos chocan ciertos formatos, ellos los asumen directamente, incluso se diría que estaban ávidos de propuestas diversas y que no repitan los mismos esquemas. En general los poemas gustaron (la nota media general que los participantes dieron a los poemas es de 6.5/10, lo que no impidió que hubieran algunos que no encontraran su tarde, como Ladies de Beiguelman): el particular palmarés de los poemas que más gustaron, según los participantes en la experiencia fue el siguiente:
[learn_more caption=»Las propuestas que más gustaron y la apreciación de los participantes » ]
[button color=»green» link=»http://andaconpiesdepluma.wordpress.com/otros/»] 1º No poesía. Bailarína, María Henar Martín 8.55/10[/button]
[button color=»purple» link=»https://remotefrog.com/telira14-concretos/»] 2º Micropoemas visuales, colectivo Telira 8.1/10 [/button]
[button link=»http://www.vispo.com/uribe/hojas2.html»] 3º Anipoema, Otoño (Hojas Rojas Secas) de Ana María Uribe. 7.77/10[/button]
[button color=»red» link=»http://moebio.com/santiago/bacterias/»] 4º Poesía por Ordenador. Bacterias Argentinas de S. Ortiz. 7.5/10 [/button]
[button color=»teal» link=»http://www.findelmundo.com.ar/wordtoys/»] 5ºPoesía Interactiva. WordToys, de Belén Gache. 7.3/10 [/button]
[button link=»http://www.uvm.edu/~tescaja/poemas/caida_libre/cl_menu.html»] 6º Poesía ayudada visualmente. Caida Libre, de Belén Escaja. 7.2/10[/button]
[/learn_more]
En cuanto a la facilidad de lectura, triunfaron Patria 8.9/10, los micropoemas de Telira 8.5/10, Hojas Rojas Secas 8.4/10 y los poemas concretos Velocidade 8.1/10 y Crisantempo 7.7/10
[Si te apetece presenciar/promover una de estas charlas, como hicieron en la universidad de Alcalá de Henares [Ver la experiencia aquí] o el instituto ICEDE [Resumen del resultado aquí], pues ya sabes, el primer paso es hacérmelo saber.]